La realidad sigue golpeando a quienes se organizaron para llevar la solidaridad a la gente afectada por el temporal del jueves pasado. El conflicto policial desvió la atención y la gente que organizaba las campañas de colectas quedó sin la ayuda de la gente común, que siempre colabora. Tal es el caso del Foro de Intendente, que a través de Sergio Ramos, concluyó ayer una colecta a la que no le fue tan bien. Desde el Foro dijeron que hay falta de agua y alimentos. Además necesitan más chapas, tirantes, mesas, sillas, ropa en buen estado, frazadas, colchones y sábanas.
Las que aún están a tiempo son tres jóvenes mujeres que iniciaron la colecta que denominaron “Juntos por Embarcación”. Una de las organizadoras, Carina Bender dijo que extendía por una semana, hasta el próximo viernes, la colecta para que la gente se acerque y entregue más cosas. Hasta ahora no juntaron lo que pensaban recolectar y vuelven a apelar a la solidaridad de todos los salteños con el fin de recolectar: agua mineral en botellas, alimentos no perecederos, artículos de higiene personal, toallitas femeninas, jabón de tocador, alcohol, algodón, shampoo, espirales para mosquitos y lavandina.
Pero lo que más urge es leche larga vida y pañales. “Esperamos la respuesta de todos los salteños para que nadie se quede a la deriva en estas fechas que son tan próximas a la Navidad”, dijo en un comunicado Rosario Saravia.
Calcula que pueden asistir a 100 familias, aunque les gustaría llegar a las 280
Las jóvenes dijeron que no trabajarán con el municipio ni con el Gobierno. Irán a darles las donaciones directamente a la gente que necesita.
Los reclamos
En algunos barrios de Embarcación la ayuda demoró un tiempo, el necesario para despertar algunos resentimientos.
Una vecina del barrio Eva Perón dijo que la ayuda municipal fue poca. En los asentamientos de El Brete y El Tucanazo cortaron la ruta a Padre Lozano, hace unos días, por unas horas, en reclamo de recursos.
Según algunos trabajadores de prensa, en el municipio sí se están entregando algunas cosas, pero lo que sucede es que todo resulta insuficiente.
“Acá la Municipalidad salió a realizar el censo y a repartir cosas, hay chicos de los colegios secundarios, ongs, iglesias de todos los credos, comerciantes o simplemente grupo solidarios que reparten cosas, pero todo resulta poco”, dijo uno de los movileros de una radio local.
El Tribuno intentó dialogar con el intendente Alfredo Llaya para que transmita cuál es la manera más operativa para que lleguen las donaciones a la gente, pero el jefe comunal no quiso dialogar con este medio.
La terrible situación de un colegio secundario
Los daños del tornado en viviendas y edificios fueron cuantiosos y, gracias a la prevención, en muchos casos se pudo evitar que no haya víctimas fatales. Este fue el caso del edificio del colegio número 5088 Doctora Isabel Ascar, que quedó caso totalmente arrasado tras el temporal de lluvia y viento y con un estudiante con un seria lesión.
Sin advertencia alguna sobre lo que se venía, los directivos intuyeron que algo grave se venía y ordenaron el traslado urgente, minutos después de las 16.30, de alumnos y docentes al salón de actos.
En el movimiento desesperado de gente el granizo trajo sus sonidos del horror y comenzaron a reventar los vidrios.
Cuando lograron entrar todos al salón hubo solo un momento de tranquilidad.
Una puerta marcada cedió a la tempestad y se rompió arrojando un vidrio contra un estudiantes de 16 años provocándole un corte en una de sus pierna, que necesitó 10 puntos de sutura.
Cuando pasó el temporal y salieron, pudieron ver la devastación en el edificio que los alberga en calle Salta y Sarmiento, ubicado en pleno barrio Progreso. Muchos vidrios rotos y marcados, puertas destruidas, canaletas colapsadas, tejas distribuidas en el piso como papelitos y el cerco perimetral desmantelado. Las autoridades del colegio dijeron que ya enviaron el informe a Educación, aunque siguen con la finalización del ciclo lectivo. Luego vino el miedo. Tienen una casa destinada al sereno pero que se usa como depósito. Los docentes temen que sea usurpada y ocupada ilegalmente.