Todo lo vivido durante la madrugada de ayer en el norte de Salta pareció extraído de una película. La odisea comenzó a las 4.10, cuando un móvil de la policía de Aguas Blancas que estaba apostado sobre la ruta nacional 50, que une esa localidad con Orán, intentó detener un Volkswagen Bora blanco con dos hombres en su interior. Estos, lejos de acatar la orden de los uniformados, aceleraron al máximo y continuaron su recorrido.
Los efectivos policiales, ante el asombro que significó la maniobra realizada por los sujetos, alertaron de inmediato al puesto 28 de Gendarmería Nacional ubicado sobre la misma ruta. Ahí los esperaron.
Al llegar al lugar, el Bora blanco aceleró aún más y esquivó también la barricada que había en el puesto. El vehículo sospechoso se dirigió hacia Orán, cuya Policía ya estaba alertada sobre el accionar. La ruta 50 entonces se llenó de varios móviles policiales para de una vez por todas detener la marcha frenética de estos individuos.
Ingresaron por una calle
Lejos de amedrentarse, los narcos siguieron con su veloz carrera, esquivaron otra vez a la Policía, e ingresaron a la ciudad norteña por una calle alternativa. Otra vez la fuerza logró ubicar al Bora blanco en uno de los barrios oranenses y comenzó otra persecución, que se extendió por varias calles de la ciudad, pero ningún móvil logró el objetivo.
Esto hizo que los delincuentes retomen la ruta 50 hacia la localidad de Hipólito Yrigoyen. En ese lugar se formó otra barricada con dos autos policiales, ambos cruzados en la arteria para impedir el paso del automóvil.
Viendo que esta vez era imposible poder esquivar los móviles, los hombres del Bora blanco frenaron y bajaron del mismo, pero lo hicieron con armas largas de grueso calibre, aparentemente Itakas. Con eso, lograron que los policías en su afán de no quedar expuestos a la agresión, retrocedieran. Esta maniobra posibilitó que los sujetos nuevamente comenzaran su loca carrera hacia Pichanal, pero esta vez eran perseguidos por un móvil de la Policía.
Se prendió fuego
Justo en el preciso instante en que un patrullero estaba por darle alcance al vehículo de los supuestos narcotraficantes, insólitamente se prendió fuego y fue consumido en su totalidad por las llamas. El vehículo quedó destruido. Al no poder seguir, los uniformados alertaron a sus pares de Pichanal, donde está el cruce con la ruta nacional 34, pero el automóvil ocupado por los presuntos narcos hizo todo lo contrario a lo que pensaba la Policía y el conductor no siguió por ahí, ya que agarró la ruta provincial 5 en dirección hacia la localidad de Apolinario Saravia.
A esa altura ya se había sumado a la persecución la policía de Tartagal.
El conductor, que al parecer era un hábil conocedor de la zona, se fue esfumando de la vista de los uniformados hasta perderlos totalmente de vista, y escaparon sin dejar rastro alguno.
Al cierre de esta edición no se tenía novedades de los narcos en fuga.
“Llevaban droga”
El automóvil marca Bora blanco y los dos sujetos que se movían en su interior eran intensamente buscados durante toda la jornada de ayer por la Policía, Gendarmería Nacional y también por la Brigada de Investigaciones.
Hasta el cierre de esta edición ninguna de las fuerzas había podido dar con ellos.
“No tenemos dudas que son narcotraficantes y llevaban una buena cantidad de droga en el automóvil”, le dijo una fuente policial a El Tribuno.
“No todos se arriesgan a hacer lo que hicieron estos sujetos. Evidentemente tenían muy bien planeado todo el circuito que iban a hacer si las cosas se le ponían feas y conocían muy bien el norte provincial”, expresó.
Lo que asombró a todos es cómo los individuos lograron burlar las barricadas de la Policía de las localidades norteñas de Aguas Blancas, Orán, Hipólito Yrigoyen, Pichanal y Tartagal, sin que pudieran ser detenidos.
Indudablemente el cargamento de cocaína era demasiado preciado para arriesgar de esa manera la vida, y a esto se le agregó el paupérrimo equipamiento que tienen los uniformados para poder combatir este tipo de delitos. La camioneta policial que casi logra darle alcance a los traficantes quedó reducida a chatarra, quemada en su totalidad. Hasta ahora se salieron con las suyas, ganaron los narcotraficantes.
BURLARON A LA POLICIA
Los supuestos narcotraficantes burlaron a la Policía de Aguas Blancas, de Orán, de Hipólito Yrigoyen y a Gendarmería. Huyeron por la ruta provincial 5 en dirección a Apolinario Saravia.